La palabra carácter posee muchos significados. En un determinado contexto, hablar del carácter de un hombre permite hacer referencia a su personalidad y temperamento. Se trata de un esquema psicológico, con las particularidades dinámicas de un individuo.
El carácter no es algo que se traiga desde el seno materno, sino que se ve afectado por el medio ambiente, la cultura y el entorno social donde cada persona se forma.
Algunos investigadores expresan que el carácter es aquello que nos diferencia de nuestros semejantes y que es el resultado del aprendizaje social, las cuales están relacionadas con los hábitos de cada individuo y la forma en la que reacciona frente a las experiencias. El carácter no termina de formarse hasta el final de la adolescencia.
Es importante aclarar que no es lo mismo carácter que temperamento, este último reúne los aspectos biológicos del carácter y está vinculado con el proceso fisiológico y aquellos factores genéticos que colaboran significativamente en las conductas sociales de los individuos. El carácter, por su parte, es el conjunto de aspectos psicológicos que se moldean con la educación, el trabajo de la voluntad y los hábitos y permiten una reacción del individuo frente a las experiencias. Es importante señalar, que el carácter está muy ligado al temperamento y que actúa en consecuencia de él en la mayoría de las personas.
Para la creación del carácter son necesarios tres componentes:
- La emotividad: repercusión emocional del individuo frente a los sucesos.
- La actividad: inclinación del individuo a responder a un determinado estímulo.
- La resonancia: respuesta ante los sucesos.
El apego es el cariño, la estima y el afecto que un individuo siente por otra persona o por cualquier cosa que puede ser un objeto, un bien, entre otros. El apego implica una relación de cariño y empatía muy importante en intensidad, ya sea entre dos individuos, entre un individuo y un animal o entre un individuo con respecto a un bien u objeto determinado y es normal que tienda a perdurar a través del tiempo.
Por otra parte, el apego, presenta diferentes fases como cualquier proceso tradicional, consistiendo de cuatro, que van desde el nacimiento del individuo y hasta el año de vida aproximadamente: preferencia por aquellos miembros de la misma especie (hasta los tres meses), predilección por los lazos familiares, aunque, no se descartan a las personas extrañas (3 a 5 meses), asociación y miedo a los extraños (6 a 12 meses), aparición de la independencia (a partir del año)
No hay comentarios:
Publicar un comentario